Cómo Realizar un Enema de Café

Dr. Gerardo Rios

Médico

La buena noticia es que los enemas de café se pueden realizar fácilmente y de forma económica en el hogar desde la comodidad de tu propio baño (o donde sea que elijas).

Para realizar un enema de café en casa, debes comprar un kit de enema junto con granos de café frescos.

INSTRUCCIONES SOBRE CÓMO HACER UNA RECETA DE ENEMA DE CAFÉ.

Los kits de enema se pueden encontrar en ciertas tiendas naturistas o tiendas de equipo médico. Recuerda siempre buscar uno que tenga un tubo y una boquilla conectados a una bolsa.
Debes comprar solo café orgánico y granos regulares (no descafeinados). Porque esto determina que estén libres de productos químicos. Además, es importante teniendo en cuenta que la calidad del café determina qué tan efectivo será el proceso de desintoxicación.
Lo último que deseas hacer es insertar productos químicos directamente en tu tracto digestivo. Sobre todo, si ya tienes inflamación y disfunción.

Como con todos los enemas, lo mejor es hacer uno inmediatamente después de defecar. Ya que esto, lo hace más cómodo, efectivo y fácil de retener por más tiempo. También puedes hacer un enema incluso si no has defecado recientemente. Por ejemplo, si estás estreñido.

Se recomienda hacer un enema desde una vez a la semana o hasta una vez al día si estás tratando un trastorno digestivo. De hecho, en algunos casos, pacientes muy enfermos (por ejemplo, personas que se recuperan de cáncer) han usado enemas de café varias veces al día.

Si optas por hacer enemas de café con frecuencia, considera comprar un kit reutilizable y limpia la boquilla con un detergente natural para ahorrar dinero.

Para aquellos alérgicos al café, las alternativas incluyen vinagre de sidra de manzana sin diluir o jugo verde. Elije lo que puedas tolerar. También puedes probar tés orgánicos, así como una variedad de mezclas de hierbas orgánicas como el té verde.

Una vez que hayas preparado tus materiales, aquí hay una guía paso a paso a seguir para realizar un enema de café de forma segura:

Primero, en una olla pequeña, agrega 2 cucharadas de granos de café junto con 3 tazas de agua. Dejándola hervir a fuego lento durante 15 minutos.
Debes recordar no aplicar la mezcla caliente. Por lo tanto, déjala enfriar hasta que este tibia. Seguidamente, cuela la mezcla para que tengas un líquido uniforme libre de partículas.
Ahora estás listo para realizar tu enema, por lo tanto, elije un lugar cómodo donde puedas recostarte durante unos 15 minutos. A la mayoría de la gente le gusta estar cerca de un inodoro y tener toallas extra a mano para limpiar si es necesario.
Dondequiera que elijas estar, lleva tu kit de enema con la mezcla y coloca la bolsa al menos 1 metro por encima de ti. Ya que esto ayuda a que la gravedad empuje el líquido más rápido para que pueda ingresar mejor a tu intestino.
Antes de comenzar, asegúrate de que la válvula esté cerrada para que no escape líquido. Usa un lubricante como el aceite de coco para cubrir la punta de la boquilla, lo que facilita su inserción en el recto. Luego, acuéstate sobre tu lado derecho en posición fetal e inserta la boquilla en tu recto, más o menos 1 pulgada.
Seguidamente, abre la válvula para que el líquido ingrese lentamente en el recto hasta que la bolsa se vacíe. Tómate tu tiempo y aprieta tanto como sea posible para que el líquido no escape.
Recuerda siempre estar en una posición cómoda, que te ayude a mantener el café dentro de ti durante unos 12 a 15 minutos. 15 minutos es el tiempo máximo que necesitas para limpiar eficazmente tu sistema. Por lo que, en este momento puedes dejar de retenerlo y puedes ir a el cuarto de baño.

Riesgos y Efectos Secundarios Potenciales de un Enema de Café

El Instituto de Enfermedades Digestivas y Nutrición de la Universidad de Corea ha estudiado los efectos de los enemas de café en varios pacientes. Ellos informan que las personas no suelen experimentar complicaciones o efectos secundarios.

Si has experimentado complicaciones por el uso de enemas en el pasado, lo mejor es hablar con un médico antes de intentar realizarlos por tu cuenta. Esta terapia no suele recomendarse a mujeres embarazadas o niños ya que pueden ser sensibles a los efectos de la cafeína.

Aun así, puede tener ciertos efectos secundarios, incluyendo desgarros en el colon y deshidratación o desequilibrios electrolíticos. Sobre todo, si se realizan en exceso.

Una forma de hacer que el proceso sea más cómodo es usar siempre un lubricante, ir despacio y seguir las instrucciones con mucho cuidado. Además, asegúrate de evitar quemaduras e irritaciones enfriando el café con suficiente líquido.