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Médico
Tanto los hombres como las mujeres desarrollan varices, aunque tendemos a pensar en ellos como un problema de la mujer. Son un problema común entre las mujeres mayores o embarazadas debido a las influencias hormonales. Y, tienden a desarrollarse a medida que envejecemos y las venas pierden su elasticidad natural.
Las mujeres tienen al menos el doble de probabilidades que los hombres de desarrollar venas varicosas. Pero, las personas de cualquier edad y raza pueden verse afectadas.
Según este informe, las opciones de tratamiento van desde conservadores (medicamentos, medias de compresión, cambios en el estilo de vida). Hasta mínimamente invasivos (escleroterapia o ablación endoluminal). Y por último, invasivos (técnicas quirúrgicas), a híbridos (combinación de terapias ≥1).
Aquí hay cinco tratamientos naturales para las venas varicosas:
Hacer ejercicio regularmente es una de las mejores cosas que puedes hacer para mejorar el flujo sanguíneo y reducir la inflamación. Se afirma que sentarse o pararse durante un largo período de tiempo se asocia con un mayor riesgo de varices.
Cuando permaneces sin moverte por mucho tiempo, es más difícil para tus venas llevar la sangre de manera eficiente al corazón. Y, combatir los efectos de la gravedad.
Se recomienda para prevenirlas hacer levantamientos de piernas y de pantorrillas, bicicleta y movimientos laterales. Para fortalecer y estirar las venas alrededor de las piernas. Los ejercicios de bajo impacto, como caminar, nadar y andar en bicicleta, también son ideales.
Las personas con sobrepeso son más propensas a desarrollar varices, especialmente mujeres con sobrepeso y ancianos. Tener exceso de peso ejerce mayor presión sobre las venas y puede contribuir a la inflamación o el reflujo venoso. Especialmente en las venas superficiales más grandes, como la vena safena.
Uno de los mejores para el tratamiento específico de las varices, es el aceite de ciprés, que aumenta la circulación y apoyar el sistema circulatorio. Trata de frotar cinco gotas de este aceite en el área problemática dos veces al día por varias semanas.
Ciertos alimentos ayudan a revertir la inflamación y mejorar el flujo sanguíneo. Lo que permite curar las varices más rápido y evitar que se formen futuras. Una dieta alta en grasas trans, azúcar, cafeína, alcohol y alimentos procesados, contribuye a la mala circulación. Así como, problemas de presión arterial, desequilibrios hormonales y aumento de peso.
Algunos de los mejores alimentos antiinflamatorios para reducir la aparición de las venas varicosas incluyen:
Arándano y castaño de indias son eficaces y seguros para el tratamiento de las varices. Ambas han sido estudiadas para la insuficiencia venosa crónica. Que causa dolor, edema del tobillo, sensación de pesadez, picazón y calambres nocturnos. También ayudan a reducir la retención de agua, problemas circulatorios, edema, diarrea, calambres por síndrome premenstrual.
Las personas con más probabilidades de desarrollar varices son:
La mayoría de las veces, las varices no causan síntomas y son un problema cosmético. La cantidad de sangre que se acumula en las venas es pequeña, y la mayoría de la sangre todavía se envía de vuelta al corazón. Sin embargo, puedes pensar en ellos como una señal de advertencia de que algo está deteriorando el flujo sanguíneo normal.
En algunos casos, las venas varicosas pueden romperse y causar complicaciones como ulceras y edema. Cuando hay síntomas, los más comunes son dolores musculares o edema en los tobillos y las piernas. Lo que puede dificultar el sueño cómodo, el trabajo, el ejercicio y caminar normalmente.
Algunas personas, especialmente las mujeres embarazadas, también terminan desarrollando pesadez o plenitud en las piernas. Además de, inquietud, fatiga, dolor, calambres, úlceras en la piel y picazón. También existe un pequeño riesgo de que las venas varicosas conduzcan a la coagulación de la sangre (tromboflebitis). En cuyo caso será necesario un tratamiento inmediato.
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